Colgado de la palmera

Nada tiene que ver esta frase con estar colgado del cable o de la luz del vecino, sucesos muy comunes en las denominadas casas chorizo o edificios departamentos sin porteros/encargados chusmas (los cuales son tan difícil de encontrar como “una aguja en un pajar”, ver definición en esta misma paginola).
¿Qué son las palmeras? ¿Cuantas clases de palmeras existen? ¿Como me cuelgo de una?...
Muchos acertijos y pocos pingüinos.
Las palmeras pertenecen a la familia Arecaceae, que cuenta con unas 2.400 especies, en su mayoría de regiones cálidas. Son
plantas monocotiledóneas leñosas, perennes, generalmente no ramificadas. Hojas generalmente pinnadas (pinnatisectas) o palmeadas (palmatisectas), pero a veces costapalmeadas o bipinnadas, grandes, siempre verdes, con vaina, típicamente agrupadas en un rosetón terminal. (Fuente: Wikipendia).
Ahora que ya sabemos que es una palmera y de donde nos vamos a colgar expliquemos porque nos vamos a colgar y el origen de esta frase.
Hay algunos que sostienen que esta frase surgió en Jamaica dado que en este país del Caribe hay un clima por demás calido, propicio para el desarrollo de las Palmeras. Otros dicen que eso del clima es una nueva falacia de la historia y que en realidad las Palmeras crecen en cualquier lado y que en Jamaica se escucho por primera vez decir esta frase la cual se la atribuyen a un inmigrante bonaerense (más precisamente de la zona de González Catan) llamado Atilio Héctor Villar. Cuenta la leyenda que Don Atilio era un radical con boina de la primera época y que con la llegada de Perón al gobierno opto por exiliarse en la tierra de los rastafaris, en donde decidió abrir un copetín al paso en la costanera jamaiquina. Villar contrato a un sobrino del mítico Bob Marley como ayudante de cocina. En un atardecer de enero el sobrino del Bob (a quien llamaremos “el otro Marley”) se olvido de hacer las compras dado que se quedo toda la tarde tomando licuados de cocos con sus amigos rastas. No tardo un cliente en pedir un licuado de cocos (siempre pasa lo mismo con los clientes que piden lo que no hay justo el día en que no hay) entonces Atilio lo mando a que baje de la palmera algunos cocos, el otro Marley arrimo una escalera de dos hojas y se subió a la palmera, debió estirarse para alcanzar la rama que sostenía a los cocos. El hombre de la boina que observaba todo esto decidió castigar a su empleado quitándole la escalera al mismo tiempo que se disculpaba con el cliente y le ofrecía un daiquiri de frutilla. El joven sobrino de Bob Marley permaneció 5 días colgados de la palmera sin que nadie notase su ausencia. Al sexto día se presento la hermana de Bob para preguntar por su hijo y Don Atilio Héctor Villar le respondió “¿así que Ud. quiere saber en donde esta su hijo? Mírelo, ahí lo tiene, colgado de la palmera. Salúdelo a Bob de mi parte y dígale que tengo todos su discos”.
Jamaica no es el único país que se adjudica el origen de la frase que da titulo a este artículo. Algunos uruguayos dicen que en su país se acuñó esta frase como respuesta a la propuesta a algunos gurises que preguntaban de donde se colgaba el ahorcado del popular juego que lleva su nombre.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy atenta la respuesta y justa corrección. A decir verdad, peco de distraida cuando digo (escribo) mientras pienso, sin terminar de pensar. Me explico? En otras palabras, noté mi error luego de enviar el mensaje -por supuesto-
Para su curiosidad, no soy madre y merezco el título de Señorita. Anónima, mientras tanto...


Saludos a ustedes.

Anónimo dijo...

Mademoiselle:

No creo haberla llamado de otro modo, aunque en francés, me temo.
Gracias por su interés en nuestro blog y por aclarar que usted no es la madre de ninguno de nosotros. (Gracias a Dios)

Salut!

Anónimo dijo...

Al 'ami' Porthos, un interrogante.
En Mar del Plata, hay Palmeras? o sólo van a tocar en los veranos?

Salut!